Pautas para mejorar tu próxima negociación

En el trabajo continuamente estamos negociando. Lo hacemos con nuestros compañeros, jefes, empleados, clientes, proveedores. Esto se debe a que la negociación no sirve sólo para realizar acuerdos importantes o resolver serios conflictos, sino que es parte de nuestra actividad cotidiana.

De hecho, la mayoría de las negociaciones que llevamos a cabo involucran personas que volveremos a ver. Es por este motivo, que cada relación que se teje con quienes negociamos a diario es fundamental y la única manera de desarrollarla es inspirando confianza.

Construir lazos confiables es el resultado de un proceso de aprendizaje. Depende de la manera en que ponemos en práctica los acuerdos que pactamos con la gente que nos rodea. Si los acuerdos se ejecutan de la manera correcta, la gente deseará negociar con nosotros en el futuro.

Y a diferencia de lo que mucha gente cree, para ser un buen negociador no se requiere un talento innato. Se trata de una habilidad que puede aprenderse y perfeccionarse.

Por este motivo, te compartimos algunas pautas para tener en cuenta en tu próxima negociación:

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